lunes, noviembre 15, 2010

La furia de la tierra desató la tragedia en la región del Bío Bío I Parte

3 marzo 2010


El fin de semana pasado la mayoría de los ciudadanos penquistas terminaban la jornada de trabajo y se disponían a enfrentar un fin de semana, quizás el ultimo en las playas, ríos piscinas o bien el campo para abordar la semana siguiente la jornada escolar.
La noche estaba estrellada, cálida, salí a fumar un cigarrillo pero nada hacia presagiar que en un par de horas más algo ocurriría. Me llamó la atención que estando en la gran urbe había un silencio casi sepulcral. Muchas familias compartieron la cena, como el caso de este reportero, pero la jornada de trabajo pasaba la cuenta y había que ir a descansar. Ah, el festival de la canción de Viña del Mar, bueno miremos un rato… El sueño, el agotamiento nos venció, nos quedábamos profundamente dormidos. Cuando de pronto… un estremecedor ruido subterráneo y un movimiento que no nos permitía mantenernos en pie, nos hizo saltar de la cama, está temblando alcance a exclamar, era el terremoto, la tierra estaba desatando toda su furia con una gran fuerza, como ensañados con los seres de esta tierra.
El sector donde resido es residencial, intercambiamos un par de palabras con los asustados vecinos; fuerte el temblor. Alguien grito _habrá un tsunami, y sin pensarlo nos subimos al auto y raudamente huimos hasta los sectores altos. Pero debía pasar a ver algunos familiares en mi sector todo era normal, sólo pánico, el alumbrado público como domiciliario estaba cortado, todo era oscuridad, las alarmas de los autos sonando, las mujeres hincadas con sus manos alzadas al cielo pidiendo piedad, los niños llorando gritando ¡mamita no llores!, una escena terrorífica, escalofriante. Comencé a avanzar con mi auto y las luces me mostraban casas destruidas, personas que corrían sin destino algunos en pijamas, bata de levantar, o cualquier cosa que encontraron a mano.

Volví a exclamar, esto fue un terremoto, la tierra se cimbraba a cada momento, las réplicas eran muy intensas hacían presiagiar lo peor, las calles estaban atochadas de vehículos que con sus pasajeros arrancaban a los sectores alto de la ciudad. Un importante medio de comunicación local radio Bíobío, después de un par de minutos ya estaba en el aire, los estudios del medio se convirtieron en un verdadero centro de operaciones de las autoridades, nos llamaban a la calma. El intendente de la región del Bío Bío Jaime Tohá, señala “recién me he comunicado con el Almirante (II zona Naval) y me ha informado que no hay peligro de tsunami, les pido que vuelvan a sus casas”. Junto a una gran cantidad de familias que estábamos protegiéndonos al escuchar dentro de todo lo malo que estaba sucediendo las palabras del representante del gobierno, lo acatamos y volvimos a nuestras casas. El caos estaba desatado desde el primer momento. Las agujas del reloj señalaban las 4 de la madrugada y comenzaba el saqueo de las farmacias, tiendas y todo aquel lugar donde pudieran entrar las mentes desquiciadas de los delincuentes, carabineros fue sobrepasado en su trabajo.
Al retornar a nuestras casas el panorama era desolador, todo en silencio, las cosas en suelo, muebles, televisores, copas, vasos, loza en fin… Por Dios, la fuerza de la tierra, será un mensaje, ¡como ensañarse tanto con nosotros! Sin piedad alguna.
Pero lo que se vino desde las 3.33 minutos de la madrugada del sábado 27 de febrero, en adelante, fue un terremoto de inconciencia, vergüenza y falta de moral que no se podrá reconstruir en varios años.
Desquiciados, vándalos y delincuentes que no tuvieron piedad y compasión alguna.

Hoy, esta retornando lentamente la calma a la ciudad de Concepción, las réplicas no cesan, el alumbrado público y domiciliario esta llegando, sin embargo gran parte de la población se encuentra sin agua potable, una importante cadena de supermercado anuncio que desde hoy (ayer), abrirán sus puertas custodiados por un fuerte contingente militar.
Los saqueos, vecinos armados vigilaban sus casas, el mar no perdono a los habitantes de las zonas costeras. Estimado lectores de Diario Chañarcillo, desde hoy llevaremos en nuestras páginas las vivencias y los acontecimientos que trajo este devastador terremoto en la región del Bío Bío.